Vivimos en un mundo digital que facilita la vida cotidiana (aplicaciones de banca móvil, carteras móviles y tarjetas de débito/crédito) y, a menudo, ni siquiera pensamos en necesitar efectivo, hasta que lo hacemos. Los cajeros automáticos pueden ser una forma rápida y fácil de obtener dinero o hacer depósitos, lo que convierte a estos cajeros en un blanco natural para los ladrones.
La próxima vez que haga una parada rápida en un cajero automático, tenga en cuenta estos 4 consejos de seguridad para protegerse a usted y a su dinero:
- Esté alerta. Presta atención a tu entorno y no utilices un cajero automático si observas a personas o circunstancias sospechosas.
- Esté preparado. Tenga su tarjeta en la mano cuando se acerque al cajero automático. Asegúrese de proteger su información usando la mano o el cuerpo para proteger su PIN. Y lleve siempre sus recibos.
- Sé precavido. Estacione cerca de los cajeros automáticos sin cita previa. En el caso de los cajeros automáticos con acceso directo, cierre todas las ventanillas de los pasajeros y cierre las puertas con llave antes e inmediatamente después de la transacción. Además, considera estacionarte lo más cerca posible del cajero automático, de modo que haya espacio limitado para que alguien se acerque a tu lado.
- Ten cuidado. Guarde su dinero de inmediato. Espere hasta que regrese a su automóvil o esté en un lugar seguro para verificar su retiro.
Si necesitas usar un cajero automático por la noche, es fundamental que tomes precauciones especiales. Asegúrese de estacionar en un área bien iluminada que esté cerca del cajero automático. Si es posible, lleva a otra persona contigo para que pueda observar tu entorno mientras estás en el cajero automático. Si el área alrededor del cajero automático está bloqueada por arbustos cubiertos de maleza o las luces del cajero automático no funcionan, busca otro lugar.
Los cajeros automáticos también pueden ser una oportunidad para que los estafadores roben la información de su tarjeta. Esto se logra conectando un dispositivo para robar información al cajero automático (o a la bomba de combustible) y capturará la información de la tarjeta cuando la insertes o pases el dedo. Para protegerse, inspeccione visualmente el cajero automático y busque:
- Residuo pegajoso o evidencia de un adhesivo utilizado para fijar el dispositivo.
- Piezas rayadas, dañadas o torcidas.
- Accesorios sueltos o adicionales en la ranura para tarjetas.
- Resistencia notable al pulsar el teclado.
Si nota alguna de estas cosas, no use el cajero automático y notifique a la institución financiera o al propietario de la empresa. Para obtener más información sobre las medidas de seguridad de las tarjetas, consulta esto entrada de blog.
Nuestra prioridad es ayudarlo a administrar su dinero según sus condiciones y ayudarlo a mantenerse seguro. Tener en cuenta estos consejos podría eliminar los posibles riesgos.